Dorotea de Austria o Ana Dorotea de Austria conocida como Sor Anne-Dorothée de la Conception nace en Viena, Sacro Imperio Romano Germánico en 1612 y muere en Madrid, España el 14 de agosto de 1694; noble austriaca; marquesa de Austria; monja en el Monasterio de las Descalzas Reales de Madrid.
Hija ilegítima del emperador Rodolfo II del Sacro Imperio Romano Germánico y de Catalina Strada conocida como Kateřina Stradová. Nieta del pintor Octavio Strada "el Viejo". Sobrina del pintor Octavio Strada "el Joven". Bisnieta del mercader, anticuario y cortesano Jacopo Strada. Fue la menor de 6 hermanos: Julio César, Matías, Carlos, Carolina e Isabel de Austria.
Su padre procuró su comodidad y educación de Ana y sus hermanos, pero nunca los legitimó.
Recibió su título en referencia al que portaban los marqueses de Habsburgo, antes que el de duques y luego archiduques de Austria.
El 20 de enero de 1612 en Praga, Sacro Imperio Romano Germánico, falleció su padre Rodolfo II.
En 1629 falleció su madre Catalina Strada.
Muertos sus progenitores, fue recogida y protegida en palacio por sus tíos, el emperador Matías I (sucesor de su padre en el trono del Sacro Romano Imperio) y su esposa Ana del Tirol.
En su confirmación y en claro homenaje a su protectora toma también el nombre de Ana.
Su tía Ana del Tirol la envío a vivir al Convento de Portacoeli en Viena, de agustinas regulares.
El 18 de febrero de 1616 en Graz, Ducado de Estiria, Sacro Imperio Romano Germánico, falleció su tio Maximiliano de Austria y Wittelsbach.
El 14 de diciembre de 1618 en Viena, Archiducado de Austria, Sacro Imperio Romano Germánico, falleció su tía Ana del Tirol.
El 20 de marzo de 1619 en Viena, Sacro Imperio Romano Germánico, falleció su tío Matías de Habsburgo.
El 13 de julio de 1621 en Bruselas, Bélgica, falleció su tío Alberto VII de Austria.
Tras la muerte de la emperatriz y del emperador y de sus tíos los archiduques Maximiliano y Alberto, su tía Margarita de Austria (Profesa en las Descalzas Reales de Madrid bajo el nombre de sor Margarita de la Cruz) pide a su sobrino el rey Felipe III que pida a su primo el emperador que la niña viaje hasta Madrid y quedar junto a su tía.
Felipe III admitió la propuesta, pero murió antes de poder ponerla en marcha, por lo que fue Felipe IV quien finalmente concertó el viaje a España con su tío el emperador Fernando.
Antes de iniciar el viaje, el emperador Fernando II de Habsburgo la había mandado llamar para que volviese habitar en palacio.
El viaje se efectuó sin revelar la identidad de Dorotea, debido a la continuación de la guerra en Alemania y la inseguridad que vivía la península italiana. Sin embargo el cortejo era el considerado como el suficiente para su rango.
La comitiva partió del Puerto de Génova en tres galeras con dirección a las costas españolas. Cerca de la costa fueron atacados por una escuadra otomana comendada por gentes de Biserta.
Ya cerca de Barcelona, los sorprendió una tempestad, consiguiendo Ana Dorotea escapar milagrosamente al naufragio de la galera principal.
Fueron recibidos por el obispo de Barcelona, Juan Sentis, virrey de Cataluña.
Tras descansar unos días y reponer sus fuerzas y bienes (ya que la mayoría de los bienes que traían se habían perdido en el naufragio) pusieron rumbo a Zaragoza donde fueron recibidos por el virrey de Aragón, Fernando de Borja, quien asignó para acompañar a la marquesa de Austria (ya que fue bajo este título seglar como se la conoció en España) a Diego Jerónimo de Vega, consejero del consejo patrimonial de Aragón, tesorero del rey. Llegó hasta Alcalá de Henares, donde es recibida por Gabriel de Alarcón, caballero de Santiago y contador del Tribunal de Cuentas, comisionado por el ey para tal fin.
En Alcalá recibió las visitas del embajador del emperador, conde de Franckemburg y de su esposa con quienes partió al día siguiente a Barajas, donde comió.
Junto con las marquesas del Carpio y Alcañices (hermanas del conde-duque de Olivares) a la huerta del Condestable, donde se hospedaría hasta su entrada pública en Madrid.
Visitó a su tía Margarita de Austria en secreto en el Convento de las Descalzas Reales.
El 30 de diciembre de 1622 hizo su entrada pública en Madrid en presencia de los reyes y los infantes Carlos y Fernando.
Fue a vivir en las Descalzas Reales.
El domingo de la infraoctava de Epifanía o del Niño Perdido de 1624 toma el habito, delante de los reyes y la corte hizo su profesión solemne.
Una vez alcanzada la edad prescrita en el Concilio de Trento, el 18 de septiembre de 1628, día en que se celebraba en las Descalzas Reales el Santo Nombre de María.
Un mes después tomó el velo.
Durante su vida religiosa contó con privilegios especiales similares a los concedidos a su tía, como el de elegir confesor y poder dar audiencias.
Fue considerada como una suerte de continuadora de la tradición establecida por la emperatriz María de formar parte del mismo miembros de la familia.
En 1628 fue retratada por Peter Paul Rubens.
Así el convento continuo acogiendo y protegiendo a otros miembros de la familia. Es el caso de Mariana de Austria, hija ilegítima del cardenal infante don Fernando, que acabaría profesando en 1659 bajo el nombre de sor Mariana de la Cruz y de Margarita de Austria, hija ilegítima de don Juan José de Austria, luego profesa en 1666 bajo el mismo nombre, sor Margarita de la Cruz que su tía tatarabuela y mentora de sor Ana Dorotea, Margarita de Austria.
Ejerció el mecenazgo artístico en su convento, encargando la restauración de la escalera principal del mismo, en 1656 y la realización de la Capilla de Guadalupe del claustro alto a Sebastián Herrera Barnuevo en 1690. En la espectacular escalera principal del Monasterio de las Descalzas Reales podemos ver a Santa Dorotea en una pintura mural. Esta decoración fue promovida por Sor Ana Dorotea, hija del emperador Rodolfo II.
También aparece la familia de Felipe IV.
Autora de diversas obras literarias.
Falleció a los 82 años de edad. Fue enterrada en el Monasterio de las Descalzas Reales.
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