viernes, 31 de marzo de 2023

Catalina de Lancáster (1373-1418)

Catalina de Lancáster nace en el Castillo de Hertford, Hertfordshire, Inglaterra el 31 de marzo de 1373 y muere en Valladolid el 2 de junio de 1418; primera princesa consorte de Asturias; reina consorte de Castilla; reina regente durante la minoría de edad de su hijo Juan II.



Hija de Juan de Gante y de su segunda esposa Constanza de Castilla.  Nieta del rey Eduardo III de Inglaterra y de Felipa de Henao, así como del rey Pedro I de Castilla y de María de Padilla.  Hermana del rey Enrique IV de Inglaterra.  Abuela de la reina Isabel la Católica.  

Por ser nieta del asesinado rey Pedro I de Castilla, Catalina fue educada como heredera al trono.  

Su padre, Juan de Gante, reclamó el trono en nombre de su esposa Constanza y de su hija Catalina, organizando una expedición con la ayuda del rey Ricardo II de Inglaterra, con rumbo a La Coruña.  

El 25 de julio de 1386 desembarcaron en La Coruña:  Juan de Gante, su esposa Constanza y la hija de ambos, Catalina de Lancáster. 

Con el tratado de Bayona del 8 de julio de 1388, por el que Juan de Gante y su esposa Constanza renunciaban a los derechos sucesorios castellanos en favor del matrimonio de su hija Catalina con el primogénito de Juan I de Castilla, Enrique de Castilla (futuro rey Enrique III de Castilla), a quienes se otorgó la condición de Príncipe de Asturias

El 17 de septiembre de 1388 en la Catedral de San Antolín en Palencia, contrajo matrimonio con su primo Enrique de Trastámara o Enrique "el doliente" (futuro rey Enrique III de Castilla).   El enlace reunía a las dos ramas dinásticas enfrentadas.   Ella tenía 15 años y él 9 años.

Juan de Gante renunció a la corona, en nombre de su esposa Constanza de Castilla (hija de Pedro I),  y Catalina  desposada por Enrique de Trastámara (futuro rey Enrique III de Castilla).  

Enrique y Catalina recibieron el título de Príncipes de Asturias, siendo desde entonces usado por el heredero de la corona castellana y, posteriormente, por el heredero de la corona española.  

Hasta 1393 en la villa de Madrid, se celebra su matrimonio formal.  Tiene tres hijos (María, Catalina y Juan de Castilla).  

El 24 de marzo de 1394 en el Castillo de Leicester, Leicestershire, falleció su madre Constanza de Castilla.  Fue enterrada en la Church of the Annunciation of Our Lady of the Newarke.

El 13 de enero de 1396 su padre Juan de Gante se casa con Catalina de Roet-Swynford (viuda de Hugh Swynford y cuñada del famoso escritor Godofredo Chaucer).  Desde 1368 Catalina de Roet-Swynford había cuidado de los hijos de Juan de Gante y de su primera esposa, comenzando en esa época con él una relación adúltera de 28 años.

El 3 de febrero de 1399 en el Castillo de Leicester, Leicestershire, falleció su padre Juan de Gante.  Fue enterrado en la Antigua Catedral de San Pablo en Londres.


El 14 de noviembre de 1401 en Segovia, nace su hija María de Castilla,  Infanta de Castilla, princesa de Asturias (1402-1405); reina consorte de Aragón (1416-1458), por su matrimonio con Alfonso el Magnánimo.  Su madrina fue la tía de su madre, María de Ayala, monja e hija ilegítima del rey Pedro I de Castilla.

El 6 de enero de 1402 Enrique III de Castilla hizo jurar heredera presunta del reino en las Cortes de Toledo, a su hija María de Castilla, siendo al mismo tiempo comprometida con su primo-hermano Alfonso (hijo de su tío paterno Fernando de Castilla), como una forma de reforzar sus derechos sucesorios.  El nacimiento de su hermano Juan de Castilla (futuro rey Juan II de Castilla), la desplazó de la sucesión; desde ese momento, ella fue solo Infanta.

En 1403 nace su hija Catalina de Castilla, Infanta de Castilla, 

El 6 de marzo de 1405 en el palacio del Real Monasterio de San Ildefonso en Toro, nace su hijo Juan de Castilla (futuro Juan II de Castilla).     

El 25 de diciembre de 1406 falleció su esposo Enrique III de Castilla.  Fue enterrado en la Capilla de los Reyes Nuevos.


Durante la minoría de edad de su hijo Juan de Castilla, los regentes fueron  Catalina de Lancaster y su tío paterno, Fernando de Antequera, de acuerdo con el testamento de Enrique III que estableció que deberían "regir ambos a dos ayuntadamente". Sin embargo, la educación y la custodia del rey niño Juan de Castilla, según los deseos de Enrique III, correría a cargo del camarero mayor Juan de Velasco, del justicia mayor Diego López de Estúñiga y de Pablo de Santa María, obispo de Cartagena.

En 1406 ejerció la regencia del reino durante la minoría de edad de su hijo Juan II, de apenas un año de edad, junto con su cuñado Fernando de Trastámara conocido como Fernando de Antequera (futuro rey Fernando I de Aragón), infante de Castilla y corregente de Castilla, junto a Catalina de Lancáster, en la minoría de Juan II. 

En 1412 su cuñado Fernando de Trastámara fue coronado rey de Aragón tras el Compromiso de Caspe.

A mediados de 1415 comenzaron los síntomas de la grave enfermedad de Fernando I de Aragón y que fue diagnosticada como Arenes de ronyons. 

El 12 de octubre de 1415 en la Catedral de Valencia, su hija María de Castilla se casa con Alfonso de Aragón.  La ceremonia fue oficiada por el antipapa Benedicto XIII, el cual también otorga la dispensa matrimonial para el enlace.  María de Castilla recibió una espléndida dote consistente en tierras y rentas, a la vez que Alfonso era elevado al rango de Infante de Castilla.

El 14 de marzo de 1416 en Igualada, la enfermedad de Fernando I de Aragón se agravó.

El 2 de abril de 1416 en Igualada, falleció el rey Fernando I de Aragón.  En su testamento legó la mayor parte de sus posesiones y títulos de Castilla a su segundo hijo Juan, además del ducado de Montblanch, mientras que su otro hijo Enrique recibía el condado de Alburquerque y el condado de Ledesma.  Por su parte su hijo Pedro recibía las ciudades y villas catalanas de Tarrasa, Vilagrasa y Tárrega y las valencianas de Elche y Crevillente.     

Su cadáver fue trasladado a la ciudad de Toledo, donde recibió sepultura en la Capilla de los Reyes Nuevos de la Catedral de Toledo.     



Su sepulcro está colocado junto al altar de San Hermenegildo y al lado del Evangelio, dos ángeles sostienen la cartela en la que aparece esculpido el epitafio de la reina:  

AQUI YACE LA MUI CATHOLICA Y ESCLARECIDA SEÑORA REINA DOÑA CATALINA DE CASTILLA E LEON MUGER DEL MUI TEMIDO REI DON ENRIQUE MADRE DEL MUI PODEROSO REI DON JUAN TUTORA E REGIDORA DE SUS REINOS HIJA DEL MUI NOBLE PRINCIPE DON JUAN PRIMOGENITO DEL REI DE INGLATERRA DUQUE DE GUILANA Y ALENCASTRE E DE LA INFANTA DOÑA CONTANÇA PRIMOGENITA Y HEREDERA DE LOS REINOS DE CASTILLA DUQUESA DE ALENCASTRE NIETA DE LOS JUSTICIEROS REYES DEL REI DON PEDRO DE CASTILLA POR LA QUAL ES PAZ Y CONCORDIA PREVISTA PARA SIEMPRE ESTA SEÑORA FINO EN BALLADOLID A 2 DIAS DE JUNIO DE 1418 AÑOS FUE TRASLADADA AQUI DOMINGO 10 DIAS DE DICIEMBRE AÑO DE 1419.  


Su muerte fue aprovechada por los infantes de Aragón para conseguir, a través del arzobispo de Toledo Sancho de Rojas, que se concertara el matrimonio de la infanta María de Aragón con el rey Juan II, la ceremonia que se celebró en Medina del Campo el 20 de octubre de 1418, meses antes de que el 7 de marzo de 1419 fuera proclamada la mayoría de edad del rey Juan por las Cortes de Castilla reunidas en Madrid.  El enlace entre el rey y una infanta de Aragón, unido al fallecimiento de la regente, la reina madre Catalina de Lancaster, afianzó el poderío en Castilla de los hijos de Fernando I que había muerto en 1416.

En 2008 María Teresa Alvarez publica "Catalina de Lancaster, primera princesa de Asturias".





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