sábado, 2 de febrero de 2019

Papa Benedicto XIII (1649-1730)

Pietro Francesco Orsini nace en Gravina in Puglia el 2 de febrero de 1649 y muere en Roma el 23 de febrero de 1730; noble, sacerdote y académico; Duque de Gravina in Puglia; Príncipe de Solofra; Príncipe de Vallata; Conde de Muro Lucano; Patricio de Nápoles; con el nombre de Benedicto XIII es elegido Papa Nº 245 de la Iglesia Católica (29 de mayo de 1724-23 de febrero de 1730).

Hijo primogénito de Fernando III Orsini duque de Gravina in Puglia y de Giovanna Frangipane della Tolfa del Tufo.  Benedicto, pertenecia a la familia Orsini de Roma y fue el tercero y último de la misma, en ocupar el Solio Pontificio.  

Cuando tenía nueve años, falleció su padre.  

Heredó de a tío, el duque de Bracciano.  

Desde su juventud demostró un decidido gusto por la orden de Santo Domingo,  En 1667 y con 16 años, aun contra la voluntad de su familia, ingresó en la Orden de Predicadores (dominicos).  

El 13 de febrero de 1668 profesó y sustituyó su nombre de bautismo por el de Vincenzo Maria.  

Estudió  filosofía y teología en las universidades de Nápoles, Bolonia y Venecia.  

A los 21 años fue nombrado catedrático.

El 24 de febrero de 1671 el Papa Clemente X lo ordenó sacerdote.  

Fiel a la regla de la Orden de Predicadores, llevó una vida austera y de moral extrema.  

El 22 de febrero de 1672 el Papa Clemente X lo creó cardenal del título de S. Sisto.  Aunque protestó contra el honor concedido, fue obligado a aceptar debido al voto de obediencia por el General de los Dominicos, y ante la insistencia del pontífice.  

En 1675 tuvo que escoger entre el Arzobispado de Salerno y el de Manfredonía (Siponto) escogió esta última porque era la diócesis más pobre.   El Papa Clemente X lo consagró Arzobispo de Manfredonia.  

Su madre, su hermana, y dos de sus sobrinas que abrasaron la vida religiosa en la Orden Tercera de Santo Domingo.  

En 1680 fue nombrado obispo de Cesena, manteniendo al grado de Arzobispo ad personam.  En 1686 una seria enfermedad atribuida por sus médicos al clima, provocó su transferencia a Benevento, arzobispado que retuvo hasta su muerte.  Cada año hizo la visita episcopal a todas las parroquias.  

Durante su episcopado, Benevento sufrió terremotos:  5 de junio de 1688 y 14 de marzo de 1702, ayudó en la reconstrucción de la ciudad, ganándose el título de "Segundo Fundador de Benevento".  

Realizó dos sínodos provinciales:  el primero en 1693 al que asistieron dieciocho obispos y el segundo en 1698 con una asistencia de veinte, todos los acuerdos fueron aprobados por Roma.   

Participó en los cónclaves de 1689, 1691, 1700, 1721 y 1724.  

En 1701 fue consagrado Cardenal-Obispo de Frascati.  

En 1709 fue aclamado miembro de la Academia de la Arcadia con el nombre de Teofilo Samio.  

En 1715 su consagrado Cardenal-Obispo de Porto-Santa Rufina.  

El 20 de marzo de 1724 comenzó el Cónclave donde sería elegido.  Se dice que en mayo de 1724 comenzó una novena de oración a su santo patrono, San Felipe Neri, pidiendo que la elección del nuevo Papa no se retrasara más.  

Después de que se tomó la votación final rehusó aceptar, argumentando que por su edad, su debilidad física, su incapacidad, y una promesa que había hecho de nunca llegar a ser Papa.   

El 29 de mayo de 1724 con el nombre de Benedicto XIII fue elegido Papa Nº 245 de la Iglesia Católica.  

Tomó el nombre de Benedicto en honor del Papa Benedicto XI, un fraile dominico como él.  Sólo por unos cuantos días utilizó el ordinal Benedicto XIV, que cambió por el de XIII cuando fue advertido de que el anterior de esa numeración había sido un antipapa (Benedicto III "el papa luna").  

El 3 de junio de 1724 fue coronado por el Cardenal Benedetto Pamphili, protodiácono de S. Maria in Via Lata.  

El 5 de mayo de 1725 el Papa Benedicto XIII nombra a Marco Gradenigo como nuevo patriarca de Venecia.  Se instalará en Venecia desde el 11 de junio de 1725 hasta el 14 de noviembre de 1734, fecha de su muerte.

Durante el jubileo de 1725 cumplió personalmente con las obligaciones de Gran Penitenciario.  

En 1726 publicó la Bula Unigenitus condenando al jansenismo.  

En 1728 publicó en tres volúmenes diversos escritos pastorales.  

Fue sepultado en la Basílica de San Pedro.  

En 1733 sus restos fueron trasladados a la Capilla de San Domingo de la Basílica de Santa Maria sopra Minerva en Roma.  

De él se dice que gustaba de almorzar huevos guisados según una receta personal, la cual en Italia, incluso hoy en día, es conocida como "huevos benedictinos" en honor de este pontífice.


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