Henri Désiré Landru conocido como Henri Landru "Barba Azul de Gambais" o “el seductor de viudas" nace en París, France el 12 de abril de 1869 y muere guillotinado en la cárcel de Versalles, France el 25 de febrero de 1922; asesino serial francés.
Hijo de un fogonero y una costurera. Se crió en la pobreza.
Estudió en la Escuela de Artes y Oficios de París.
En 1889 y con 20 años, embarazó a su prima hermana Marie Reny, y tuvieron que casarse. La pareja tuvo cuatro hijos. En 1922 se separaron.
Fue autor de varios robos menores. Tres veces fue llevado a la cárcel. Su padre por vergüenza se ahorcó en un árbol del Bois de Boulogne.
En 1909 lee en la prensa un anuncio de una dolorida viuda, madame Izoret, quien ofrecía su patrimonio a cambio de "un varón honrado que me haga compañía". Landru conquista a la viuda y le arrebata sus ahorros, unos 20,000 francos. La viuda lo denuncia y nuevamene cae en la cárcel.
Cuando cumplía su condena, lo sacan para enviarlo al frente. En septiembre de 1914 durante la Batalla del Río Marne, cayó herido y lo dieron de baja.
En el Petit Journal de París, publicó su primero de varios anuncios: "Viudo, dos hijos, cuarenta y tres años, solvente, afectuoso, serio y en ascenso social, desea conocer a viuda con intenciones matrimoniales".
Dejó de usar su nombre por el de doctor Fréymet, el geómetra Dupont, el ingeniero Lucien Guillet, el viudo Raymond Diard.
Su primera conquista fue Jeanne Cuchet de 39 años, quien vivía con su hijo de 17 y que poseía un capital considerable.
Siempre residió en París. Entre 1915 y 1919 alquiló una casa en en Gambais cerca de París, asesinó a siete de sus once víctimas, en su cocina, incineraba los cadáveres de sus víctimas.
Anotó en su libreta el nombre y los datos de las mujeres que respondían, cada viaje en tren, el precio de cada boleto, su horario, su destino, los nombres de todas las mujeres, y las sumas que le confiaron. Descuartizaba y quemaba los cadáveres de las víctimas a las que estafaba. En las casas de sus víctimas dejó sogas, hachas, sierras, martillos, puñales, tijeras, tenazas, pinzas.
En 1919 fue arrestado. El inspector Jules Belin, de la primera brigada móvil de la policía parisina, logró que a través de lo escrito en las libretas, se descubriera la manera en que convencía a esas jóvenes viudas o jeunes vieilles filles (jóvenes solteronas). Enamoró a 293 mujeres, viudas o solteronas.
Su juicio fue seguido por todo el mundo. El presidente del tribunal, el honorable Gilbert, le dio la palabra al acusado: "Me procesan por diez mujeres, cuando he conocido centenares ¡Qué generoso es este tribunal!"
Vestido como un dandy, confesó todo, excepto los asesinatos: "Estafador, lo admito. Pero asesino, no. Ellas estaban solas, y les di un poco de esperanza. Si maté, ¡que me traigan las pruebas!"
El 30 de noviembre de 1921 en Francia, un tribunal lo condenoa muerte por 11 asesinatos probados (10 mujeres y el hijo de una de ellas), aunque la policía calculó que eran entre 117 y 300 mujeres.
El día de la ejecución se perfumó, recibió a su familia, se despidió de ella, el verdugo lo afeitó, rehusó oír misa "para no hacer esperar al verdugo y al médico", y subió al cadalso. Sus últimas palabras fueron: "…no es la primera vez que se ha condenado a un inocente…"
En 1963 se descubrió una carta en la que reconocía ser el autor de los asesinatos.
Fernande Segret, tal vez el verdadero amor de Landrú, se fue al Líbano como institutriz. El 25 de enero de 1968 la actriz Fernande Segret, última conquista de Landru, se suicidó arrojándose al foso de arrojándose del castillo de Flers-de-l''One, dejando una nota: "Aun lo amo, y sufro demasiado. Me quitaré la vida".
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