domingo, 19 de octubre de 2025

Juana Catalina Romero (1837-1915)

Juana Catalina Romero conocida como Juana Cata "la Didjaza" nace en el Barrio de Jalisco, Tehuantepec, Oax., el 27 de noviembre de 1837 y muere en Orizaba, Ver., el 19 de octubre de 1915, cuando se dirigía a Ciudad de México para curarse de sus enfermedades; comerciante; oaxaqueña de origen zapoteco; aprendió a usar las armas; jugaba naipes, cubilete y billar; vendedora de cigarros; su vida esta relacionada con Porfirio Díaz.


Hija de Juan José Romero y María Clara Egaña.  

Pasó sus primeros años en una vecindad sola con su madre, sin educación formal, lo cual era común en su época.  Aprendió a leer y a escribir a una edad tardía.  

Las clases bajas, la temían teniéndola por bruja y en comunicación con los naguales o espíritus del Monte Ruyadeja.  

A la edad de 19 años, conoció a los dos hombres de su vida:  el comandante liberal Porfirio Díaz Mori y el cabo Remigio Toledo, militar tehuano de San Blas, quien años más tarde se pasó a las filas del conservadurismo y del imperialismo francés.  

En un billar conoció a Porfirio Díaz cuando este llegó al Istmo de Tehuantepec.  Apoyo a Porfirio Díaz con préstamos o donaciones financieras para pagar la soldada de las escasas tropas liberales y una eficiente labor de espionaje en el campo militar de los "patricios", los conservadores del lugar.  


Durante la intervención francesa, apoyó con sus recursos al ejército. 

El conde francés Charles Etienne Brasseur, en una expedición que hizo por el Istmo de Tehuantepec, dijo:  "Que la primera vez que la vio quedó impresionado por su aire de soberbia y orgullosa, por su rico traje indígena, tan parecido que los famosos pintores europeos la representaban como la diosa Isis".  Le dedico varios capítulos en su libro Voyage sur l'Isthme de Tehuantepec dans l'état de Chiapas et la République de Guatemala, 1859 et 1860 (Paris 1861). 


Un día, cuando se enteró de que aquel soldado a quien había salvado de la muerte era el hombre más poderoso de México, empacó y se lanzó a visitarlo.  Porfirio Díaz como agradecimiento, simpatía y amistad, le mandó edificar en el centro del Istmo de Tehuantepec un palacete con 6 habitaciones, jardines, salón principal, cocina amplia, antecomedor, un comedor para 25 personas y caballerizas al fondo de la propiedad, todo debidamente decorado con muebles traídos de Francia, vajillas de cristal florentino y porcelana checoslovaca.  

Se dice que Porfirio Díaz mandó a construir las vías del Ferrocarril Nacional de Tehuantepec a la orilla de la casa de Juana para poder llegar a ella con mayor facilidad.

Porfirio Díaz, al parecer él la olvidó muy pronto pues no la menciona en sus memorias ni en su correspondencia.  

Fundó colegios; restauró iglesias; encabezó la lucha por salarios justos, a pesar de ser ella misma una terrateniente.  

Entabló relaciones de negocios en EEUU, París, Turquía, Jerusalén, Roma y Barcelona, incluso un par de ocasiones fue recibida por el Papa León XIII.  

Fue dueña de los ingenios Santa Teresa, Santa Clara y San Juan de la Cruz.  

Es reconocida por la creación de la “Vela Bini”, una forma de estilización del traje regional de la tehuana con encajes y muselinas.

Creó el Instituto de las Artes y Buenos Oficios para muchachos, y el de Artes Manuales y Musicales para mujeres jóvenes que pretendían escapar del yugo patriarcal.  Repartió becas a los jóvenes de Tehuantepec para que fueran a estudiar a Puebla y Ciudad de México.  

El que fuera hogar de Juana Cata es un chalet francés construido en 1913, apenas dos años antes de su fallecimiento, una mansión réplica del Castillo de Chapultepec, situado en Ciudad de México, contiene muebles, menajes, obras artísticas, artesanales y efectos personales de la Didjaza de alto valor histórico y cultural.  


Nunca se casó ni tuvo hijos.  

Se cuenta que el día que muere sucedió un fuerte temblor.  

Entre los años 20 y 40 circuló en México un billete de $5.00 y en ella estaba el monograma de una mujer Oaxaqueña llamada la Tehuana.  


El 29 de diciembre de 1944, se colocó su estatua de bronce en el parque central de Tehuantepec, como merecido homenaje a esta gran benefactora de Tehuantepec y de todo el Istmo.  


El H. Congreso del Estado de Oaxaca otorga la Medalla Juana Catalina Romero Egaña en el marco del Día Internacional de la Mujer.

El domingo 18 de octubre de 2015, a propósito del centenario de su muerte, es declarada "Benefactora de Tehuantepec" por la LXII Legislatura en sesión solemne realizada en la explanada de Santo Domingo Tehuantepec, Oax.  

La madrugada del jueves 31 de diciembre de 2015 dentro del presupuesto para 2016, la LXII Legislatura estatal aprueba 18 millones de pesos para el proyecto del Museo de Doña Juana C. Romero en el lugar conocido como "Chalet de Juana Cata".  

El jueves 13 de agosto de 2015 en el Centro Cultural Xavier Villaurrutia de la Secretaría de Cultura de Ciudad de México, se presenta el libro "Juana Cata:  La confidente de Porfirio Díaz" de Antonio Olivera.  


En 2020 Francie Chassen-López publica "Mujer y poder en el siglo XIX.  La vida extraordinaria de Juana Catarina Romero, cacica de Tehuantepec".











No hay comentarios:

Publicar un comentario