miércoles, 22 de mayo de 2024

Jeanne Rozerot (1867-1914)

Jeanne Rozerot nace en Rouvres-sous-Meilly, Francia el 14 de abril de 1867 y muere en París, Francia el 22 de mayo de 1914; costurera francesa; amante de Émile Zola y madre de sus dos hijos.


Hija de un campesino y huérfana de madre.  Viajó a París a buscar trabajo.  

En mayo de 1888 fue contratada como costurera y costurera por Alexandrine,  la esposa de Émile Zola, en su casa de Médan.  

Sigue al matrimonio Zoladurante sus vacaciones en Royan, con otros dos sirvientes.  

Hacia 1888 todo parecía rodar suavemente en la vida de Émile Zola.  Viajó a un balneario en Royen, sobre la costa atlántica, en compañía de su editor Georges Charpentier, el pintor Fernand Desmoulin y Alexandrine, se perfilaba como el de unas vacaciones estivales relajantes e intrascendentes.  Sus dos compañeros de viaje y el alcalde de la ciudad, Victor Billaud -asiduo visitante a su residencia-, lo iniciaron en la afición por la fotografía.  

Un pasatiempo que se convirtió rápidamente en una práctica sistemática, una forma de atesorar detalles de la realidad que reflejaba en sus novelas, aunque curiosamente, no la utilizara con fines literarios.  

En Royen, Émile Zola se enamoró perdidamente de Jeanne Rozerot, la joven y esbelta costurera de 21 años que acompañaba a su esposa Alexandrine.  Cuando estaban a punto de salir, descubrió que llevaba un botón de la chaqueta algo suelto.  Jeanne se lo cosió, con prisas, y cortó el hilo con sus dientes ahí mismo, sobre su cuerpo, el escritor sintió una punzada que revivió pasiones dormidas durante mucho tiempo.  


El caso es que él y Jeanne se hicieron amantes.  Émile Zola compra un apartamento en París donde instala a Jeanne.  Con ella tiene dos hijos Denise y Jacques, los que no pudo tener con su esposa Alexandrine.  Se volcó en su segunda familia con responsabilidad, cariño y dedicación.  

Como no se admitía el divorcio, siguió llevando una vida oficial junto a Alexandrine y otra secreta junto a Jeanne y sus hijos, a quienes instaló en Verneuil, no muy lejos de su residencia de Médan a orillas del Sena, y veía casi a diario.  


La fotografía se convirtió en su forma de legitimar esa existencia.  Jeanne fue su musa y su modelo en centenares de placas.  Escenas familiares, comidas al aire libre, paseos, los juegos de los chicos.  Retrató a los niños como modelos al capricho de su padre, disfrazados, posando en distintas actitudes, corriendo por el campo. Llegó a hacer cerca de 7,000 placas desde 1888 hasta su muerte en 1902.  


Compró los equipos más sofisticados de la época e instaló tres laboratorios para su revelado.   

Por una carta fechada el 16 de agosto de 1892, Emile Zola le explica a Jeanne Rozerot que evita el escándalo al no separarse de su esposa y le asegura que los hijos recibirán una parte de su herencia.  Por lo tanto, divide su vida entre dos hogares:  en el que viven Jeanne y sus hijos, y en el que vive con su esposa Alexandrine.  

Su amante y sus dos hijos se quedaron en verano en Verneuil-sur-Seine, donde Émile Zola los visitaba diariamente en bicicleta y tomaba muchas fotos familiares.  


En julio de 1894 Emile Sola anota "No soy feliz.  Este compartir, esta doble vida que me veo obligado a vivir acaba por llevarme a la desesperación.  Había soñado con hacer felices a todos los que me rodeaban, pero veo que eso es imposible".   

El 13 de enero de 1898 Émile Zola  publica su carta "Yo acuso" en el diario La Aurora, donde afirma que el gobierno francés manipula los hechos en el caso de Alfred Dreyfus, militar acusado de traición.  Por la libertad de  prensa, se evitó una condena y un fusilamiento injusto.  

El ministro de Guerra, Paul Billiot denunció a Émile Zola.  El 7 de febrero de 1898 Émile Zola es juzgado por apología del delito en Francia.  El juicio derivó en una pena de un año de cárcel y 3,000 francos de multa.  La sentencia en su contra fue una victoria moral que puso en primer plano las irregularidades del caso, cuyas resonancias cruzaron las fronteras de Francia.

Émile Zola fue obligado a exiliarse en Inglaterra, convirtiéndose así en el primer intelectual comprometido de la época contemporánea.  

En junio de 1899 la justicia civil anuló el juicio militar que había condenado a Alfred Dreyfus en 1894.  

En 1899 Émile Zola regresa a a Francia, con su fama literaria aún intacta, desempeña un influyente papel como intelectual en la opinión pública.  

En agosto de 1899 Alfred Dreyfus, hecho un despojo humano, se presentó ante el Consejo de Guerra que se formó en Rennes.  Había pasado cuatro años y medio en la Isla del Diablo, en condiciones penosas. 

Geroges Méliès, pionero del cine, filmó una película sobre el caso Dreyfus, que llega hasta el juicio en Rennes.

El 19 de septiembre de 1899 Alfred Dreyfus volvió a ser un hombre libre.

Alexandrine Zola se había enterado de la relación con Jeanne a través de una carta anónima y, por más que instó a su marido a dejarla, no lo consiguió. 

Al día siguiente se le esperaba a Émile Zola para la ceremonia de readmisión de Alfred Dreyfus en el ejército.  Iban a estrechar sus manos por primera vez.  

El 29 de septiembre de 1902 después de cenar y charlar Émile Zola con su esposa Alexandrine sobre la última edición de los tres primeros tomos de Les quatre évangiles, se acostaron.  De madrugada, su esposa Alexandrine se sintió enferma, fue al cuarto de baño y al regresar encontró a  Émile Zola despierto y también mal.  Cuando este se levantó cayó al suelo y su mujer trató de llamar al servicio, pero se desvaneció sobre la cama.  

El 29 de septiembre de 1902 en un accidente doméstico, falleció Émile Zola.

Anatole France proclamó un discurso que terminaba así:   "No le compadezcamos por haber padecido; envidiémosle.  Erigido sobre el cúmulo de ultrajes que la estupidez, la ignorancia y la maldad hayan jamás provocado.  Su gloria alcanza una altura inaccesible.  Envidiémosle, su destino y su corazón le concedieron la mayor recompensa: ha sido un momento de la conciencia humana".   

Jeanne Rozerot y sus hijos siguieron el funeral de Emile Zola perdido entre la multitud.   

El domingo 5 de octubre de 1902 fue enterrado en el Cementerio de Montmartre con la asistencia de un gentío inmenso.   Allí estuvo durante seis años.  

Solo hasta 1906 se probó que Alfred Dreyfus era inocente.   

En 1908 los restos de Emile Sola fueron trasladados al Panteón en París, con lo cual se le rendía un homenaje tardío.  Alexandrine y Jeanne asistieron juntas, a la entrada en el Panteón del hombre que fue para ambos el hombre de su vida.  

Mientras las cenizas de Zola eran llevadas al Panteón, Alfred Dreyfus fue atacado a balazos por un extremista de derecha y resultó herido en un brazo. 
 
Tras la muerte de Jeanne, algún tiempo después, Alexandrine adoptó a sus dos hijos para que fueran los herederos legales de su padre.  A pedido de Alexandrine Zola, los niños recibieron el nombre de su padre natural a su muerte.  Denise (20 de septiembre de 1889-12 de diciembre de 1942) (recibió el nombre de Émile Zola tras una decisión del Tribunal Civil de París el 29 de mayo de 1908 y luego por decreto del Presidente de la República el 4 de mayo de 1909) y Jacques (25 de septiembre de 1891-14 de enero de 1963) (recibió el nombre Émile Zola por decreto del Presidente de la República el 13 de junio de 1892, luego por el Tribunal Civil de París el 28 de julio de 1893).  Nacidos fuera del matrimonio, llevan el nombre de su madre, Rozerot y luego Émile-Zola.

En 2009 Isabelle Delamotte publica "Le roman de Jeanne:  A l'ombre de Zola", a quien Émile Zola susurró tiernamente:  “Estarás en mis páginas, en todas mis páginas a partir de ahora”.   Es la historia del increíble amor que une a Jeanne y Émile Zola, a pesar de su diferencia de edad.  




No hay comentarios:

Publicar un comentario