Louise Marie Thérèse conocida como la Monja Negra de Moret o la Mora de Moret nace en París, Francia el 16 de noviembre de 1664 y muere en Moret-sur-Loing, Francia en 1732; monja benedictina; su vida fue objeto de una serie de historias en el siglo XVIII; se le llamaba María Ana de Francia por suponer que era hija de la reina consorte María Teresa de Austria y de su paje enano Nabo.
Ante la vida apática y aburrida de su esposa María Teresa de Austria, el rey Luis XIV "el rey sol" decidió ponerle como paje de compañía a un joven pigmeo que le había regalado su primo-hermano, Francisco de Borbón-Vendôme, duque de Beaufort, que llevó a la Corte Francesa a la vuelta de uno de sus muchos viajes comandando el ejército Real por el Mediterráneo y norte de África en calidad de superintendente general de navegación.
Al joven paje, de corta estatura y piel oscura, lo convirtieron al cristianismo (como era costumbre hacer con los esclavos en aquella época) y se le bautizó con el nombre de "Nabo".
María Teresa ya había dado a luz a dos hijos, en 1661 un varón Luis el Delfín de Francia (aunque no reinaría) y Ana Isabel (fallecida un mes y medio después de nacer en 1662), la muerte prematura de su pequeña, además del ninguneo que padecía por parte de su esposo, habían hecho que cayera en una depresión.
Con la llegada a palacio de Nabo cambió todo y a partir de entonces era frecuente ver en el rostro de María Teresa alguna sonrisa sacada por el ingenio y simpatía de su sirviente; se convirtieron en inseparables, viéndoles pasear por los jardines entre risas y divertidas conversaciones.
A inicios de 1664 se anunció que había quedado embarazada por tercera vez.
El 16 de noviembre de 1664 se puso de parto, dando a luz a una niña con poca salud y de aspecto quebradizo, cuya piel era de un tono más oscuro de lo normal, se creyó en la posible paternidad de Nabo de la recién nacida. Se dijo que el color más bien tirando al azulado y que debía tratarse de la cianosis, transmitida por su padre (Luis XIV) y que se trataba de una coloración azulada de la piel a causa de una oxigenación deficiente de la sangre y que el monarca debía haber recibido genéticamente por vía materna de la familia de los Medici (quienes la padecían congénitamente).
La pequeña, que fue bautizada con el nombre de María Ana falleció cuarenta días después de nacer, eso se dijo.
Casualmente, a partir de entonces también se pierde el rastro del joven Nabo, de quien nunca más se supo y mucho se ha especulado.
Se cuenta al parecer la pequeña no falleció, sino que fue entregada a las religiosas de la Abadía de Moret-sur-Loing, donde figuraban los datos de una monja que pasó toda su vida enclaustrada en el convento y cuyo nombre era Louise Marie Thérèse, cuya piel era negra y en su fecha de nacimiento figuraba el 16 de noviembre de 1664, a cambio, la Casa Real pasaba una generosa pensión económica, además de ser visitado el frecuentemente por varios miembros de la familia real (entre ellos la propia reina María Teresa).
Incluso en las memorias de la prima hermana del rey Luis XIV, Ana María Luisa de Orleáns, duquesa de Montpensier, aparecen una clara referencia a la posible infidelidad de la reina.
Aunque son pocos los datos sobre ella, existe un retrato conservado en la Bibliothèque Sainte Geneviève in Paris (Biblioteca de Santa Genoveva de París), investigaciones realizadas por la Société de l'histoire de Paris et d'Ile-de-France (Sociedad de Historia de París y de Francia) en 1924 bajo la dirección de Honoré Champion, concluyó que esta pintura al pastel fue realizada alrededor de 1680 por la misma persona que pintó una serie de 22 retratos al pastel de los reyes de Francia (desde Luis IX a Luis XIV), entre 1681 a 1683 por encargo del padre Claude Du Molinet, bibliotecario de la abadía de Sainte Geneviève.
También se ha dicho que fue una huérfana hija de una pareja de moriscos entregada por Madame de Maintenon al convento; cuyos padrinos fueron los reyes y como ahijada del monarca, esta niña podía referirse al Delfín como su hermano.
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